La formación continua, no solo posibilita adquirir nuevos conocimientos, también permite desarrollar habilidades de pensamiento crítico, explorar nuevos campos de estudio y áreas de interés. Bajo esta premisa, el joven estudiante de Ingeniería Electrónica, Fernando Viana, de 26 años de edad, egresó del Harvard University Aspire Leaders Program, un programa de formación dirigido a estudiantes universitarios sobresalientes de todo el mundo.
“Tuve el honor de participar en este prestigioso programa, donde durante siete intensos meses accedí a clases con profesores de talla mundial y compartí experiencias con jóvenes de más de 150 países. Como paraguayo, ser el único representante de mi país fue un orgullo y una oportunidad que asumí con gran compromiso”, expresó muy emocionado Viana.
De entre los más de 16.000 postulantes, solo unos pocos lograron culminar con éxito los cinco módulos del programa; Fernando destacó que “para avanzar, tenía que ir aprobando módulo tras módulo”. Finalmente, solo 100 estudiantes terminaron el curso. “Me llena de orgullo haber sido uno de los finalistas del selecto grupo de jóvenes líderes globales.
FORMACIÓN INTEGRAL
Gracias a esta formación Fernando pudo expandir su visión sobre los desafíos que enfrentamos a nivel mundial. Entre los principales ejes abordados, buscando ser parte activa del cambio, rescató los temas sobre liderazgo, gestión de proyectos, análisis de resultados e impacto social.
El joven paraguayo también recibió sesiones de mentoría, en donde pudo exponer el trabajo que viene llevando a cabo en Paraguay con “Jaku’e – Participación ciudadana”, una iniciativa que busca inspirar y empoderar a los jóvenes a través de las tecnologías de la información, dándoles herramientas de participación para generar impacto en sus comunidades.
“El programa me brindó consejos y observaciones invaluables para poder aumentar el impacto de mi proyecto y poder llegar a más jóvenes a nivel local y regional. Con Jaku’e nuestro objetivo principal es conectar a los jóvenes con iniciativas de impacto social, que les permita desarrollar habilidades blandas tales como el liderazgo, empatía y trabajo en equipo. Además, buscamos ayudarles a crear sus propios proyectos comunitarios”, detalló Viana.
A la fecha, esta iniciativa suma más de 2.000 jóvenes que accedieron a una capacitación en diferentes espacios de aprendizaje, más de 20 iniciativas conectadas a la comunidad virtual de Jaku’e y más de 10 proyectos sociales ejecutados por los participantes.
APOSTAR AL CRECIMIENTO
La construcción de un líder social implica un proceso continuo que combina la educación, la experiencia y el compromiso. Fernando es un claro ejemplo de ello, por lo que insta a los jóvenes a nunca cansarse de aprender y ser muy curiosos.
“Hay un consejo de mi mamá que siempre recuerdo: las oportunidades no vienen solas, hay que salir a buscarlas. Por lo que tenemos que ser curiosos y nunca parar de aprender. Los voluntariados, los clubes de debate, el activismo social o involucrarse en el centro de estudiantes, son espacios ideales para ir desarrollando las habilidades necesarias para poder afrontar este tipo de desafíos”, puntualizó el joven.
Hizo énfasis en que es clave no limitarse nunca, pero a la par ser conscientes de los aspectos que aún se pueden potenciar para trabajar en ello y alcanzar ese objetivo trazado. “No hay que tenerle miedo a las oportunidades, deben animarnos a probar. No siempre las cosas van a salir como queremos, pero de eso se trata, de los fracasos se aprende”, concluyó Fernando.